Cuatro días despúes de haber visto "Perdida", lo que queda conmigo de la pelicula es el extraño sentido de armonia que hay durante ciertas escenas; en particular, los flashbacks a las fases iniciales de la relación entre Nick (Ben Affleck) y Amy (Rosamund Pike). En estas escenas, nos parece que hay una química perfecta entre ellos, y que nada puede salirse mal. Sin embargo, vemos todo esto en el contexto de una relación que se ha acabado de la manera más desastrosa imaginable. Entonces, a pesar de la armonia que supuestamente existe entre Nick y Amy en estos momentos iniciales, sobreponemos un sentido del peligro que hay porvenir; no aceptamos la imagen perfecta que estas escenas nos vende.
Y, me parece que nuestro rechazo de esta armonia tiene mucho que ver con nuestro sentido innato de la realidad. Rechazamos la presentación de una relación perfecta, de la misma manera que burlamos de un anuncio que nos presenta una imagen de la vida demasiado conveniente ("Usa este producto y tus problemas se te irán" etc); nos parece falso, y incluso peligroso. Sin embargo, estas escenas de "Perdida" se han quedado conmigo. Y por qué entonces? Pues, quizás porque, a pesar del hecho de que rechazamos la imagen de una relación perfectamente armoniosa, nos sigue gustando la idea. La queremos creer, a la vez que la vemos con escepticismo. En breve entonces, estas escenas son como un anuncio que te vende algo muy atractivo, que sabes que no puede existir.
Four days after having seen "Gone Girl", what sticks with me from the film is the strange sense of harmony that fills certain scenes; in particular, the flashbacks to the initial phases of the relationship between Nick (Ben Affleck) and Amy (Rosamund Pike). In these scenes, it seems to us that there's a perfect chemistry between the pair, and that nothing can gone wrong. However, we see all this in the context of a relationship that's ended in the most disastrous way imaginable. Hence, in spite of the harmony that apparently exists between Nick and Amy in these initial moments, we superimpose a sense of the danger that's to come; we don't accept the perfect image that these scenes sell us.
And, it seems to me that our rejection of this harmony has a lot to do with our innate sense of reality. We reject the presentation of a perfect relationship, in the same way that we laugh at an advert that presents us a too-convenient image of life ("Use this product and your problems will vanish" etc); it seems false to us, and even dangerous. However, these scenes of "Gone Girl" have stayed with me. Why then? Maybe because, in spite of the fact that we reject the image of a perfectly harmonious relationship, we still like the idea. We want to believe in it, at the same time that we view it with scepticism. In brief then, these scenes are like an advert that sells you something very well, that you know can't exist.